El proyecto establece la evaluación obligatoria de profesores, procesos y resultados del sistema educativo nacional, desde el nivel preescolar hasta el medio superior y otorga autonomía constitucional al INEE.
Ciudad de México • Con 424 votos a favor, 39 en contra y 10 abstenciones, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó esta noche en lo general el proyecto de reformas a la Constitución Política que establece la evaluación obligatoria de profesores, procesos y resultados del sistema educativo nacional, desde el nivel preescolar hasta el medio superior, y otorga autonomía constitucional al Instituto Nacional de Evaluación de la Educación (INEE).
Sostuvo, además, que la educación pública “está más allá de las disputas mezquinas y revanchismos políticos”.
Por el PRI, la legisladora Paulina Alejandra del Moral dijo que las virtudes de la reforma educativa son “sustanciales y de largo alcance, además de reafirmar la supremacía del Estado mexicano sobre cualquier otro interés.
Recordó que a la iniciativa de Peña Nieto se adhirió, incluso, el gobierno del estado de Oaxaca, “identificado” con Andrés Manuel López Obrador.
El legislador panista Fernando Rodríguez Doval dijo a su vez que la reforma educativa es una “victoria cultural” del PAN, mientras la votación de la bancada perredista se dividió, aunque mayoritariamente a favor del dictamen.
Entre los cambios al proyecto original incluidos en el dictamen de la Comisión de Puntos Constitucionales destaca la atribución de los cinco integrantes de la Junta de Gobierno del INEE de elegir de entre ellos mismos a su presidente, en una decisión colegiada y por mayoría de votos.
La iniciativa del presidente Enrique Peña Nieto planteaba que el titular del Ejecutivo Federal nombraría “de entre los miembros de la Junta de Gobierno a su presidente”.
El proyecto considera la posibilidad de reelección para los integrantes de la Junta de Gobierno del INEE, pero limita a doce años su permanencia en el cargo.
La comisión dictaminadora incorporó los principios de transparencia e igualdad como criterios de evaluación de los docentes, además de establecer la posibilidad de que los padres de familia opinen sobre los planes y programas de estudio definidos por el Ejecutivo Federal.
En sus artículos transitorios, el dictamen aprobado prevé la creación de un Sistema de Información y Gestión Educativa y para ello mandata al Instituto Nacional de Estadística y Geografía a realizar en 2013 un censo de escuelas, maestros y alumnos, a fin de que la autoridad disponga en una sola plataforma de los datos necesarios para la operación del sistema educativo.
Ordena asimismo establecer, en forma paulatina y conforme a la suficiencia presupuestal, escuelas de tiempo completo con jornadas de entre 6 y 8 horas diarias, “para aprovechar mejor el tiempo disponible para el desarrollo académico”.