De concretarse la reforma constitucional, a la Ley General de Educación y fortalecer la autonomía de las instituciones de evaluación y del magisterio, esto "se convertiría en el 'Quinazo' del Siglo XXI", sin que necesariamente implique "quitar" a Elba Esther Gordillo Morales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), planteó la organización Muévete por la Educación.
Al presentar su propuesta de Reforma Constitucional y de modificación a la Ley Federal de Educación, previó a que el presidente Enrique Peña Nieto dé a conocer la iniciativa que presentará ante el Congreso de la Unión, investigadores miembros de la Coalición Ciudadana por la Educación aseguraron que de concretarse este "trabajo de relojería y de servicio profesional" se iniciará la verdadera reforma al sistema.
Ricardo Raphael, investigador del Centro de Investigación y Docencia Economicas (CIDE), aseguró ¿Para qué quitar a Elba Esther (Gordillo) si el control que mantiene se va a desmoronar con una iniciativa de esta naturaleza? ¿Qué hay más moderno y legal que eso?, planteó en conferencia de prensa.
Explicó que el eje central del poder de la profesora Gordillo Morales en el sistema de educación se centra en el control de las plazas y del servicio profesional de carrera, por lo que si se le quita esa rectoría habrá que celebrarlo.
A diferencia de lo que ocurrió en Pemex, a finales de los 80's y cuando era presidente Carlos Salinas de Gortari, este se advierte no como un cambio de un líder por otro líder, como vimos que ocurrió, sino que se trata de un planteamiento inteligente para modificar desde la estructura la organización sindical, aseguró Ricardo Raphael.
Teresa Lanzagorta señaló que los tres elementos que se vuelven centrales en esta iniciativa del presidente Enrique Peña son la reforma a la Constitución y a la Ley General de Educación para fortalecer el marco normativo pero también incidir en la forma de operar de las instancias autónomas, tales como las que abordan la evaluación y el magisterio.
Ante los medios de comunicación, consideraron que el nombramiento de Emilio Chuayffet al frente de la Secretaría de Educación Pública (SEP) implica la relevancia que se le ha dado de "asunto político" a la transformación del sistema, por lo que lo calificaron de "secretario de Gobernación bis" para que se lleve a cabo la reforma.
Insistieron que hasta ahora existe un "breve ambiente de cambio" en el país, y ratificaron su participación en el debate nacional para romper con un sistema establecido en 1943 que permite regresar la rectoría de la educación al Estado mexicano.
Informaron que su iniciativa de reforma a las leyes ha sido presentada ante diversos grupos de senadores y confiaron que llegará al Congreso de la Unión como una alternativa de la sociedad civil.