El dispositivo STEREO registró que el CME fue lanzado a una velocidad de 724 kilómetros por segundo, algo lento en comparación con las velocidades que alcanzan estos fenómenos.
Por ahora la Agencia Oceanográfica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) señaló en un comunicado que se espera que el CME golpee a la Tierra el 24 de noviembre, con un nivel G1, el menor en la escala de la agencia, principalmente en los polos desde la latitud 60 grados.
Las eyecciones pueden llegar a la Tierra entre uno y tres días después si es que apuntan hacia nuestro planeta. De hacerlo puede provocar tormentas geomagnéticas, que es cuando la CME golpea la magnetosfera de la Tierra. Las consecuencias pueden ser desde auroras en los polos hasta perturbaciones en sistemas eléctricos o interferencia en sistemas satelitales de comunicación y GPS.
El campo magnético que recubre al planeta ha estado activo debido a un aumento de electrones y a otras actividades solares que ya llegaron al planeta. El pasado 16 de noviembre hubo dos erupciones prominentes, unas tras otra, durante un periodo de cuatro horas.
Las partículas expulsadas no fueron dirigidas hacia la Tierra en esa ocasión (Fuente: NASA)